Comenzó el espectáculo con Dark Elf, unos chavales que cruzaron el charco desde Ibiza para mostrarnos su buen Heavy Metal melódico. Grupo compuesto de batería, bajo, dos guitarras -uno de ellos es la voz principal- y la buena segunda voz y coros, aquella mujer con la cual todos quisieran tener hijos, como le gritaban a lo largo de su actuación.
Un buen festival de música tiene que tener, por lo menos, un organizador cachondo que no le importe subirse al escenario en cualquier momento del evento a hacer reír a la gente y a mostrar que, mientras la fiesta exista, a él no le importa el que dirán. Eso es lo que debió pensar "el Panollo" antes de subirse al escenario con su banda Obispo Fornicado, a despotricar y mal hacer canciones que ya estaban hechas como, por ejemplo, 'En qué estrella estará' de Nena Daconte, o 'Eye of the tiger', pero esta vez en versión castellana. Mezclaron Hardcore, Punk y un poco de Rock para que el festival se convirtiera en "El club de la comedia", con vestimentas de obispos.
Dar las gracias de antemano a todo el equipo que llevaba las riendas del festival, en especial a Maolo (Azrael Records).
Como si de un ángel se tratara, comenzaban su actuación Tabú con un Heavy Metal clásico, tipo Ángeles del Infierno. El público durante toda la noche, por desgracia, estuvo con la modorra encima.
Seguidamente les tocaba el turno a los Metal Mareny, grupo con el cual me quedé satisfecho. El cantante daba todo lo que llevaba dentro para animar la fría noche del público. El grupo se dejó la piel.
Después vinieron los Canker con un Black/ Dark Metal… no sé muy bien cómo llamarlo. Melenas moviéndose, rasgueos estridentes de guitarra y demoledora batería con el doble pedal a flor de piel.
Azrael empezaron a eso de las 2:30 de la madrugada, con una gente que llevaba desde el principio reservando fuerzas para su actuación, entregándose al máximo. 'Sacrificio', la canción más solicitada, la tocaron con Manu de Dark Elf. Dieron un repaso completo a su discografía, sobre todo a su último CD, 'Libre'.
Se rumoreaba que iba a ser la última edición del Panollo Rock. Esperemos que no sea así.
Fran Molero
CALIBRE ZERO
Madrid – Ritmo & Compás – 27.11.08
Gran concierto para la inauguración del primer álbum de Calibre Zero, 'Derrotando miedos'. La sala R&C es una apuesta segura por su gran acústica y por los profesionales que allí trabajan de técnicos, que lo hacen francamente bien consiguiendo un sonido espectacular. Acertaron con sus teloneros, Wild, ya que eran perfectos para abrir boca con un Heavy-Metal muy genuino y preparar al público para la tralla que se le venía encima. La sala estaba prácticamente hasta la bandera.
Calibre Zero no decepcionó a nadie y salieron a por todas con una puesta en escena excepcional dando mucha caña desde el principio. El frontman de la banda, Ricardo Lázaro, no paraba de animar a las masas, moviéndose de un lado a otro del escenario, cantando con el público y haciendo gala de un headbanging bestial. Miguel a la guitarra y Pedro al bajo le seguían el show sacando toda la fuerza que tenían para transmitirla a sus incondicionales que se agolpaban haciendo pogos frente a ellos y cantando las letras de sus enérgicas canciones. Fue especialmente cañera la canción 'Derrotando miedos', donde se vio el potencial de Antonio Cuenca, el batería más versátil que he escuchado en el panorama nacional actual. Otra canción que conviene recalcar en el concierto: 'Así es (como siempre seré)' ya que fue la que dio pie a más movilidad y fuerza, si cabe, por parte de la banda y el público. Como colofón final, Calibre Zero se despidió con su tema estrella 'Rock hasta morir'. Al acabar el concierto le pedí a Ricardo que me dijera en dos palabras lo que le pareció en su conjunto, y él me respondió: "Pura energía." Y en efecto, eso es lo que fue.
Rodrigo Trigo
HUMA + ATMOSPHERE GREY + CICLÓN
Madrid – Gruta 77 - 14.12.08 
Ciclón es un grupo de Madrid cuyas vistas están puestas en los ochenta, así que no es raro que su "myspace" lleve el añadido de "metal80" a su nombre ni que en su breve actuación colaran versiones de Barricada ('Esta es una noche de Rock&Roll'), Ángeles del Infierno ('Esclavos de la noche'), interpretada a su modo, y Banzai ('Rock duro'), la que mejor les quedó. Las intercalaron con temas propios como 'Por ti', 'Violencia' y 'Caballeros del Rock' para calentar el ambiente con un Heavy clásico que no desentonaba con la audiencia. Nacida la banda en 2006, esperamos que vayan madurando y que el CD no se haga esperar.
Con las primeras notas de Atmosphere Grey captamos más madurez sobre las tablas y un sonido más compacto. Aunque no es mi terreno, me atreveré a contar que lo suyo es algo así como Death melódico, que te puede recordar a In Flames o At The Gates (creo que interpretaron una de los últimos; si bien, repito, no me muevo por estos pantanales) y lo que más llama la atención es que de las voces guturales se encarga una señorita que cumple con nota alta. Gustaron.
Los de San Fernando (Cádiz) eligieron una de las noches más frías de la capital para dar carpetazo a la gira 'A muerte'. Mientras los pingüinos danzaban a su aire en la calle, nosotros nos calentábamos dentro de la sala paulatinamente con la fuerza de una base totalmente integrada en la formación –Ángel y Pablo-, los guitarrazos de Luirry y las voces siempre acompasadas de Salva y Glory. Puede que no sea el mejor concierto que he visto de Huma, pero mantuvo al personal atento y feliz con los temas de su estreno en CD ('Luchando a muerte') como las imprescindibles 'A solas' y 'Alma en pena', su ya famosa versión de 'The evil that men do' de Maiden y las sorpresas que por fuerza eran los estrenos sobre un escenario madrileño de canciones que forman parten de su nuevo y más duro disco ('Semilla del mal'), que se pone a la venta a finales de este enero. El eslogan de la película titulada como la nueva entrega discográfica de Huma rezaba: "Ten cuidado con lo que deseas". No lo tengas en acercarte a esta fantástica banda ni a su esperado nuevo plástico. Tampoco cuando veas saltar a las tablas, como ocurrió en esta velada, a la mismísima muerte con unos tatuajes que me resultaron conocidos.
Jon Marin
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